El Campeonato del Mundo de MotoGP aterriza este fin de semana en el circuito de Sachsenring para disputar el Liqui Moly Motorrad Grand Prix Deuchtsland, la 8ª cita del calendario.

Enea Bastianini y Luca Marini, que lograron un resultado muy positivo en el Gran Premio de Catalunya, quieren seguir con la buena racha que atraviesan en Alemania y así poder seguir sumando puntos para el equipo.

La acción dará comienzo el viernes a las 9:55 con los primeros entrenamientos libres del Liqui Moly Motorrad Grand Prix Deuchtsland.


“Llegamos a Sachsenring, un circuito donde no estuvimos el año pasado debido al coronavirus. De todas formas, es una pista que normalmente se me ha dado bien, sobre todo con la Moto3. Con la Moto2 solamente pude correr una vez y veremos cómo será estar aquí con una MotoGP.”


“Sachsenring es una pista muy especial, pero con su encanto y con MotoGP lo será aún más. La pista ya era estrecha y pequeña con la Moto2, y ahora tengo curiosidad por ver qué efecto tendrá en la Ducati. Va a ser un fin de semana difícil, y creo que las diferencias serán muy pequeñas. El circuito tiene pocos kilómetros, así que sólo nos separarán unas décimas de segundo, y este año la categoría está a un nivel muy alto, con diferencias de menos de un segundo entre el primero y el vigésimo. Esta es otra razón por la que será fascinante. Empezaremos con todo lo positivo que recogimos del test en Barcelona para seguir creciendo.”